Que los ciclistas colombianos vuelvan y ganen en Europa
Preguntas.
Por: Duván Marín Martínez
Sin triunfo en etapas culminó la participación del ciclismo colombiano en las tres grandes de Europa. El segundo puesto en la general del Giro de Italia con Daniel Felipe Martínez fue lo más destacado, mientras que el de mejor posición en el Tour de Francia, Santiago Buitrago (10°) y Einer Rubio (27°) en la Vuelta a España. El balance general merece muchos análisis de lo que pasa actualmente con nuestros ruteros en el viejo continente, donde en otros años brillaron y animaron permanentemente las 63 fracciones disputadas.
No es nada en contra de los ciclistas, pero vemos que hoy están más en condición de gregarios, eso sí de oro, lo que también cuenta. Puede ser parte del contrato, decisión de los manejadores o técnicos que frente a las presiones de los patrocinadores arman escuadras, para ganar, lógico, incluyendo como acompañantes a unos de experiencia casos Egan Bernal, Nairo Quintana o Rigoberto Urán y a otros que con importante pasado reciente llevan mucho tiempo en clásicas de una semana.
Buitrago, Tejada, Rubio, Santiago Umba, Fernando Gaviria, por ejemplo, conforman el contingente ajustado a las determinaciones para rodear al capo del equipo. En las recientes, vimos que han cumplido de gran manera, aunque dejan interrogantes en relación con los triunfos parciales, que muchas veces, pese a las mejores intenciones no lo consiguieron, especialmente en las de montaña por encima de 1500 metros sobre el nivel de mar, donde los escarabajos asumen con propiedad y desempeñan al máximo el compromiso de conducir al opcionado al título.
Los corredores siempre han expresado lo difícil que es salir en una fuga y mantenerse en procura de una etapa y en ese aspecto Harold lo hizo, sin éxito para cruzar primero. Los demás, es posible que hayan cumplido al pie de la letra las instrucciones u órdenes técnicas, porque la estrategia a veces funciona y en otras fracasa por diferentes motivos.
En las etapas llanas Gaviria hizo lo propio, pero tampoco cantó la victoria; el esfuerzo fue evidente y estuvo cerca. En las clasificaciones de montaña, por puntos, sprint, jóvenes, este año no hubo registros que permitan ofrecer un panorama similar al de hace un lustro o una década, cuando los cafeteros se mostraban en todas y celebraban las anheladas victorias. 2024 deja el subtítulo de Martínez en Italia y el octavo podio para el país en esa afamada, gracias al rol de primero en el Bora, más el top 10 de Buitrago en la gala.
Hoy nos llenamos de interrogantes ante la falta de mejores resultados con los demás. Obviamente no aseguramos que no tengan la capacidad suficiente y sean los entrenadores encargados de otorgar funciones que al final es lo que cuenta para los grupos ciclísticos:
- ¿Volverán los colombianos a brillar en las tres de tres semanas? 2. ¿Llegan muy biches para exigirles cuando somos triunfalistas? 3. ¿Los técnicos desperdician el poder de nuestros pedalistas en las fracciones de montaña? 4. ¿Seguirán supeditados a la letra contractual? 5. ¿Los que llevan más de uno o dos años en Europa, habrá que esperarlos con más paciencia? 6. ¿Han sido más altas las expectativas de la afición? 7. ¿Tenemos hoy la nueva generación de relevo? 8. ¿No han nacido los sucesores de Herrera, Parra, Egan, Rigo, Nairo, Patrocinio, y otros, protagonistas en España, Francia e Italia? 9. ¿Es necesario que los de la actual generación compitan en la Vuelta a Colombia y Clásico Rcn, como complemento de su preparación? 10. ¿Seguirán en posición de gregarios los vinculados hoy al llamado world tour?
No es nada en contra de los corredores, reiteramos, simplemente nos preguntamos cuáles pueden ser las razones de la menor figuración esta temporada. En países como Colombia, tres canales de televisión transmitieron en directo Caracol, Rcn y Espn y la sintonía se la reparten, pero resisten los intereses económicos para continuar, si tenemos presente que las inversiones son millonarias.
(Porque nada hay imposible para Dios. Lucas 1:37)
